Thursday, November 11, 2010

La más completa de las ciudades

Ciudad del Cabo debe ser una de las ciudades con más atractivos y actividades del mundo. Su ubicación, al borde del océano atlántico y al pie de una particular cadena montañosa, le da infinidad de posibles excursiones.


A esto se suma el gran trasfondo histórico de la ciudad, con fuertes militares de los más antiguos del sur de África y el famoso balcón donde Nelson Mandela, primer presidente negro de Sudáfrica, dio su primer discurso luego de ser liberado tras largos años de prisión durante el Apartheid.

Calles de Maputo



“Derecho por Lenin hasta agarrar Mao Tse Tsung a la derecha y caminar dos cuadras” fueron las indicaciones para llegar al Backpackers de Maputo.

La frase es extraña pero se debe a un aspecto particular que dejó el régimen socialista en Mozambique: Los nombres de las calles de la Capital mozambiqueña son de líderes y pensadores de izquierda y de guerras y movimientos populares.








Playas paradisíacas

Renombradas por todo África, la playas de Mozambique eran un lugar al que esperábamos llegar con ansias, y no nos defraudaron. El color del agua y de la arena junto con todo lo que las rodea hacen de estas playas lugares que pensamos solo existían en las películas o las revistas turísticas.

Dar la vuelta a la Isla Bazaruto caminando en dos horas, o caminar por Kilometros en Pomene sin ver una sola persona son actividades que inclusive estando ahí parecen irreales. Sin duda una experiencia que vale la pena repetir.







Un gran robo

Si bien recibimos repetidas advertencias, nos dimos cuenta que en África la inseguridad es la misma que en cualquier otra parte del mundo. Ni más ni menos. Con la particularidad de que en muchos países, debido a la gran pobreza, la gente no tiene recursos para obtener armas de fuego, con lo cual los robos son manoteos de billeteras o situaciones confusas que algunos aprovechan para robar alguna que otra cosa.

Tuvimos la mala suerte de que la única vez que nos pasó fue en Mozambique, cuando cambiábamos de colectivos, y nuestra billetera iba particularmente muy cargada de dinero. Sin embargo, y a pesar del mal humor inicial, entendimos que es una situación que puede pasar en cualquier lado y decidimos tomarlo con el mayor humor posible.

En honor a ese gran robo, preferimos recordar otro, no tan costoso y mucho más divertido.



Compañero revolucionario

Si bien el portugués mozambiqueño es para los que hablamos español, relativamente fácil de comprender, siempre es interesante encontrar a alguien que habla castellano en otra parte del mundo.

En Tete, ciudad del centro de Mozambique, tuvimos que esperar un día para tomar un colectivo hacia la costa, y lo hicimos en el bar de la terminal. Para apagar la sed producida por el agobiante calor tomamos unas cuantas cervezas y en el medio de nuestra prominente borrachera escuchamos hablar un español con acento diferente. Se trataba de Moisés, un militar mozambiqueño, que debido al ex régimen socialista Mozambiqueño había hecho su entrenamiento en Cuba.

El encuentro fue festejado con otra ronda de cervezas y varias anécdotas sobre su estadía en Cuba, incluido un encuentro con Fidel Castro, cuando este visito su cuartel.

Frontera de Mozambique




Cassacatiza no es una frontera muy utilizada por los turistas que entran a Mozambique. Es un paso mas bien usado por camioneros que transportan mercancías hacia y desde Zambia. Sólo cuenta con un pequeño puesto, sin electricidad, y algunos oficiales a cargo del lugar.

Llegamos a las 17.55, cinco minutos antes de que cierre la frontera y el comentario del sorprendido oficial a cargo, al enterarse que ni siquiera habíamos hecho nuestras visas en Lusaka, sino que las teníamos que hacer en ese momento fue sorprendente: “pero como llegan a esta hora, cuando ya se puso el sol, como voy a ver para hacerles las visas”.

Sin embargo, con la ayuda de una linterna y de su muy buena voluntad (cualidad extremadamente anormal en una frontera) el oficial nos hizo, a mano, las visas y nos dejo dormir afuera del puesto fronterizo hasta la mañana siguiente Cuando salía la primera Camioneta hacia Tete.

Combatiendo el fuego




En Botswana por año se queman miles de hectáreas debido a incendios descontrolados. En toda la Sabana africana, durante la estación seca los granjeros queman pastos cercanos a sus casas de manera intencional para evitar grandes incendios accidentales. Sin embargo, debido a los repentinos vientos cambiantes, los incendios pueden descontrolarse.

Eran cerca de las diez de la mañana cuando nos disponíamos a pasar otro día junto a la pileta de un Backpacker cerca de Gweta, en el centro de Botswana, cuando un empleado del lugar nos vino a preguntar si podíamos ayudar a apagar un gran incendio en un parque nacional que se acercaba a un hotel. Accedimos gustosamente en busca de una nueva aventura y no salimos decepcionados.

Durante buena parte del día combatimos junto con muchos voluntarios locales las llamas que crecían asombrosamente cada vez que soplaba el viento, expandiéndose por la llanura de manera que parecía interminable.




Bao Babs




Famosos por su rol en el cuento de Antoine de Saint Exupery, El Principito, los Bao Babs son árboles imponentes. En África se los conoce como los árboles que están al revés, ya que sus ramas parecen enormes raíces y su gran tronco pareciera disponerse para sostener al mundo.


Los Bao Babs tienen grandes frutos con semillas rodeadas de una pasta blanca, cuya textura se parece al merengue, pero de gusto un tanto ácido, que hace las veces de caramelos para los locales. Sin embargo si estos frutos no son extraídos del árbol, en el mes de noviembre florecen, con la particularidad de hacerlo de noche y a una velocidad descomunal. En poco más de dos minutos una enorme flor blanca nace en la oscuridad de la noche.





Las últimas palabras...

Aunque no parezca por su gran tamaño, los elefantes pueden ser muy rápidos. Es normal que carguen contra personas y en África muere mucha gente a causa de esto. Nosotros quisimos averiguarlo por cuenta propia...

Victoria Falls



Las cataratas Victoria tienen una gran similitud con las de Iguazú aunque no son tan anchas y son más altas. El impacto visual y sonoro de estar presente ante semejante formación de la naturaleza es difícil de describir. A esto se le suma la extravagante fauna que la rodea, con elefantes y búfalos que beben del rió a metros del salto de agua.



Estas cataratas son uno de los puntos turísticos más conocidos de África y mantuvieron su popularidad inclusive durante la crisis política y económica que vivió Zimbabwe en gran parte de esta década.











La ruta desconocida

El transporte público en Zimbabwe no suele ser utilizado por la población blanca. Todos se manejan con autos y pueden asegurar que es imposible recorrer ciertos trayectos sin estar motorizado, cuando en realidad es más sencillo de lo que parece.
Transporte público Zimbabwense

Al norte de Zimbabwe, en el lago Kariba, oficialmente hay un ferry que lo atraviesa de este a oeste, pero ya no funciona regularmente y, cuando lo hace, cuesta muy caro. Pero hablando con la gente del lugar se puede atravesar de distintas maneras. Una es navegar en un bote pesquero hasta la mitad del lago y luego continuar por tierra hacia el oeste en distintas camionetas. El camino es polvoriento, incomodo y largo. Pero la gente siempre es amable y trata muy bien a los extranjeros. Lo que en un principio nos parecía imposible fue, en realidad, bastante sencillo.
Esperando el transporte